En este artÍculo quería hablar de ese colectivo que tan gravemente se han visto afectados por la pandemia: la tercera edad, los mayores o de una forma más familiar: nuestros abuelos.
El Covid- 19 ha alejado a muchos de ellos de nuestras vidas y de nuestros hogares, y los que han sobrevivido a este brutal periodo han visto gravemente deteriorada su salud física y mental, esto se conoce como capacidad funcional.
La capacidad funcional también comprende los recursos sanitarios, asistenciales y del ambiente físico inmediato del que dispone el anciano, biológicamente ésta va mermando con el paso de los años; en cuanto a la salud física el tener que permanecer durante mucho tiempo en el domicilio sin apenas realizar ejercicio ha degenerado en mayores problemas de hipotonía, deterioro cognitivo, osteoporisis, dolor musculares y agravamiento de patologías previas; en cuanto a la salud mental; la ansiedad y el miedo por ser un colectivo de riesgo, la tristeza y un sentimiento de soledad acusado ha degenerado en ocasiones en trastornos depresivos y ansiosos.
Una de las consecuencias psicológicas del confinamiento que he observado de manera reiterada es el incremento del sentimiento de ineficacia e inutilidad.
Nuestra sociedad, en especial en España la figura del abuelo es la de individuo que experimenta un deterioro físico, cognitivo y social, que cada vez puede realizar menos tareas y/o actividades y queda relegado al cuidado de los nietos
El concepto de vejez a lo largo de la historia…
La concepción de la vejez ha experimentado cambios a lo largo de la historia que conocemos; en la Edad Media, la vejez estaba estrechamente relacionada con lo religioso: la muerte, la enfermedad y la longevidad estaban asociados a castigos divinos.
En la Prehistoria los ancianos eran considerados como hombres sabios, grandes transmisores de conocimiento, como aquellos hombres con prestigio, poder e influencia, también hay que considerar que la esperanza de vida rondaba cerca de los 30 años..
En la Grecia Antigua empieza a deteriorarse el concepto de vejez, los griegos grandes impulsores de la perfección, del culto al cuerpo y la belleza consideraban la vejez y la muerte como un castigo.
En la Antigua Roma, el anciano representa gran autoridad dentro de la familia y como responsable de los esclavos.
El Renacimiento es la peor etapa para la consideración del anciano, los valores predominantes son las juventud, la belleza y la perfección.
A partir del Mundo Moderno el poder político se delega al pueblo, aparece el funcionariado y la jubilación , el trabajo es lo más valorado y el Estado se convierte en responsable del cuidado de los ancianos.
Y en el Mundo Contemporáneo hasta la actualidad, a la persona mayor se le considera un ser débil, sin capacidad de aprender y progresar, no avanza; el desarrollo de la medicina además ha favorecido un mayor incremento de la esperanza de vida, esto implica una mayor asistencia médica y a su vez un mayor empobrecimiento del Estado de Bienestar: reducción de la natalidad e incremento de la inmigración, así como cambios de la familia extensa a la nuclear donde el anciano se encuentra más desprotegido y solo, la creación de servicios sociales y residencias que se encargan del cuidado del mayor, aspecto del que cada vez menos se ocupa la familia.
Es fundamental desarrollar el Envejecimiento Saludable en nuestros mayores, entendido como el proceso que fomenta y mantiene la capacidad funcional en la vejez que ayuda a que los mismos se sientan útiles, acompañados y válidos como individuos libres e independientes en nuestra sociedad.
Aprendamos un poco más, ¡COHOUSING! ¿Que és?
Este concepto nació en los países nórdicos en la década de los 60 y se ha desarrollado en EE.UU en los 80 donde tiene bastante persistencia; consiste en diseñar un edificio a medida de sus residentes para que sea eficiente, sostenible y optimizado al uso real que se va a hacer de él, además tiene el objetivo de crear comunidad y vínculos de colaboración para que puedan ser aprovechados por la comunidad de propietarios y se beneficien de estos recursos propios.
Esto requiere de los interesados su compromiso y participación tanto en el diseño del edificio como en su administración , haciéndose imprescindible desde el inicio la clara definición de sus necesidades.
Aunque todavía en nuestro país no es una práctica muy extendida, el Cohousing favorece entre otras cosas un envejecimiento activo, saludable, participativo y de cohesión, donde muchos mayores deciden jubilarse para vivir de manera independiente y ser los dueños de su vida y decisiones.
Por un envejecimiento activo y saludable
Entre los aspectos importantes a destacar y a desarrollar en nuestros mayores:
- Incremento de la participación de los mayores en la comunidad: teniendo en cuenta sus características intrínsecas y diferenciales, así como su capacidad funcional, fomentar la participación en talleres, actividades, centro de días, asociaciones y voluntariado del barrio y/o el vecindario.
- Dotar a los mayores de recursos en los que los mismos puedan responder a sus necesidades reales y a lo que ellos quieren y necesitan, no impuesto por familiares y/ o determinados recursos y servicios asistenciales de salud en el que el paciente no decide ni participa en la toma de decisiones sobre lo que quiere hacer, en relación a su enfermedad, estado vital o anímico, conocidos como recursos centrados en las personas.
- Derrocar ciertos estereotipos sociales en relación a la vejez; como el edadismo: creencias y valores negativos de lo que implica envejecer y ser mayor y favorecer un papel activo del mayor mejorando su sentimiento de utilidad, eficacia y bienestar.
- Desarrollar grupos y actividades donde el mayor pueda establecer relaciones significativas con su grupo de iguales y con demás personas del barrio y la comunidad, previniendo sentimientos de soledad acusados, ansiedad y tristeza y generar sentimientos de pertenencia y cohesión.
- Y no menos importante, ante la vivencia subjetiva de la pandemia, ayudarles a manejar la información de una manera más objetiva y ajustada, dotándoles de los recursos necesarios para prevenir y mantener unas condiciones higiénicas y preventivas adecuadas, el permitir que expresen sus miedos y emociones, validándolas, en donde el miedo no les paralice y les impida estar activos, aun manteniendo una consciencia real de posibles riesgos y medidas de actuación necesarias.
“El envejecimiento no es la juventud perdida, sino una nueva etapa de oportunidad y fuerza.” Betty Friedan
Los mayores en familia
La familia es un pilar fundamental para la salud emocional de las personas mayores, sin embargo, en muchas ocasiones, no sabemos como manejar las situaciones que tienen que ver con sus necesidades ni físicas ni psíquicas.
Estas situaciones pueden llevar a ocasionar verdaderos problemas en la familia, ya que puede haber diferentes opiniones sobre la mejor manera de tratarles, problemas con las familias políticas, falta de entendimiento entre abuelos, hijos y nietos, etc…
En estas situaciones la Terapia de Familia se ha consolidado como una herramienta altamente eficaz para solucionar estos problemas de convivencia, de comunicación o de falta de entendimiento y comprensión.
En Psicopartner puedes encontrar terapeutas especializados y experimentados en realización de terapia familiar tanto a nivel presencial como online.
Puedes llamar al 669 489 678 o bien utilizar nuestro servicio de psícologos online donde estaremos encantados de poder atenderte y darte más información sobre la terapia de familia.